Gracias a la vida

Poco pudiera pedirle a la vida en estos momentos; quizá vivir el doble de lo que ya he vivido tal y como lo he hecho hasta hoy.

Nací por capricho de mi madre. Crecí y me desarrollé por capricho propio.

Amé y desamé por convicción, a veces con dolor, quizá con mucho dolor, pero feliz.

Me cagué en cuantos prejuicios viajaban a mi alrededor. Hice de mi vida lo que quise y quiero.

Quisiera hacer más, mucho más.

Siempre hay un HOY donde aprendemos lo que hasta este momento desconocemos.

Aprendí a ser padre primerizo a destiempo. Aprendo a ser padre en tiempo.

Aprendí que la amistad no se intercambia, sólo se da y si se recibe:¡Bienvenida sea! Lo mismo ocurre con el amor.

Quiero aprender a ser mejor, es díficil, pero lo intento.

Me gustaría ser mejor pareja de mi pareja. Ella se lo merece.

Conocí lo bueno de la vida que me hice y hasta lo excelente. También conocí lo malo y lo peor en algunos momentos. Conocí buena gente, gente que pasó sin dejar huella y gente que no quiero recordar.

Se dice que la familia es lo único serio que tienes en la vida. Es probable que sea así, pero mi familia seria fue la que yo me construí con mis amigos, muy pocos; con mis hijos y mi pareja hoy.

Siempre han tenido un lugar importante en esa familia mis perros. Puedo nombrarlos uno a uno y llorar por la muerte de cada uno de ellos.

Recuerdos guardo muchos pero no me gustaría vivir de ellos. Quisiera acumular más e irlos dejando por el camino, a mis hijos, a los que me aprecian o los que me aman en silencio.

Toqué muchas veces lo más alto y nunca me arrepentí de lo que hice, para bien o para mal.

Me inculcaron valores buenos. Los supe aprovechar al máximo y no por ello dejé de probar los otros, los menos buenos...

No me ha importado mucho lo que he tenido, es probable que haya tirado muchas cosas durante mi recorrido, pero también he vuelto a acumular otras que aun conservo, aunque trato de tener lo menos posible para que la carga sea más leve.

QUIEN ESTÉ LIBRE DE PECADO QUE LANCE LA PRIMERA PIEDRA... nunca he podido encontrar una piedra cerca de mí, por lo que estoy lleno de pecados. ¡Cuán feliz me hace saber que soy un pecador más en esta vida!

Y aquí estoy, contemplando el mar que no es el mío pero que hablan entre ellos. Esperando a que me den la entrada al grupo de los "terceros" que aun los miro desde fuera y me sonrío al ver que detrás de cada uno de ellos hay historias como la mía, quizá algunas muy tristes y llenas de rencor.

Tigre, según los chinos. Cáncer, según los otros. Hijo de Oshun, según los de mi Isla, pero firme en mis ideas, aun cuando sé que pueden estar equivocadas. Optimista, frente a esta corta existencia vital. Amante de la vida y Amado por la vida.